El comercio de electrodomésticos ha conocido un primer cuatrimestre fantástico. ¿La fiesta podría haber llegado a su fin?
GfK ya advirtió en el último informe de seguimiento semanal del mercado («sales track») que el impulso dado por el final de la TDT de baja resolución en España a las ventas de televisores estaba perdiendo ímpetu. No está mal, después de haber aguantado casi diez semanas.
Pues bien, es difícil de pronosticar si ya ha terminado la fiesta, pero en la semana del 15 al 21 de abril el mercado total de bienes tecnológicos de consumo ha sido plano.
El comercio online se comportó mejor que el tradicional, aunque con un crecimiento exiguo, de +2%, que no alteró el dato del conjunto del sector.
En efecto, el comportamiento del mercado total fue prácticamente igual al del canal tradicional, que repitió la cifra de igual semana en el año anterior (ventas en valor).
Dentro de eso, el mercado de televisores de panel todavía anotó un crecimiento de +5%, mucho menos en otras semanas del año, pero mucho más que numerosos meses de 2023, en los que el televisor sufrió de manera extraordinaria.
En el resto de la electrónica de consumo, las cosas fueron mal para las barras de sonido y los sistemas de audio en casa (−22%), y el mercado fue plano para auriculares.
Mal en informática, de −2% en impresoras láser a −20% en ordenadores de sobremesa.
Que las tabletas crecieran +17% y los smartphones +7% es motivo de consuelo.
La línea blanca sigue flojeando: lavadoras −4%, frigoríficos −6%.
Siguen salvándose los pequeños electrodomésticos con crecimientos suaves, de nuevo con las cafeteras (y máquinas de bebidas calientes, que es lo mismo) tirando del carro (+9%).