El hombre que firmó la absorción de Whirlpool Europa es un activista climático... al que le van las emociones fuertes.
Hakan Bulgurlu, en un momento profesional dulce.
Algunos están hablando ya de Hakan Bulgurlu como el CEO de Arçelik y también de Beko Europe, o sea, la dueña de las operaciones de Arçelik y de Whirlpool en Europa. Puede que sea así, pero no es seguro. Las actividades de Arçelik en Europa las desarrollará en efecto Beko Europe, pero Arçelik es más que eso, puesto que tiene más actividades, obviamente en Turquía pero también en Asia Central. Bulgurlu podría continuar como máximo directivo de Arçelik, combinando actuaciones directas y acciones a través de Beko Europe, asignando a Beko Europe, en un rango inferior, un director especialmente dedicado. Por otro lado, Hakan Bulgurlu también podría ascender a otro nivel dentro del grupo propietario a su vez de Arçelik, es decir, el conglomerado Koç Holding, AS. Propiedad de la familia del mismo apellido (Koç), fundado en la primera mitad del siglo pasado, el grupo Koç reúne a más de un centenar de empresas y emplea a poco menos de 100.000 personas, en los sectores de energía, finanzas, bienes de consumo duraderos, automoción y otros. En fin, todo eso está por aclarar en breves semanas.
Hakan Bulugurlu es el responsable de Arçelik que aparecía en la firma del acuerdo con Marc Bitzer (Whirlpool Corp) a comienzos de 2023, en una foto famosa que, dicho sea de paso, recordaba un poco el cuadro de la Rendición de Breda (el cuadro de las lanzas de Velázquez), por las expresiones y las poses de ambos directivos.

Escalando y esquiando en entornos hostiles, defendiendo la naturaleza, y pilotando empresa.
Bulgurlu es un turco nacido en Oslo hace 52 años, dijo de un matrimonio mixto, turco-noruego. Licenciado en Economía e Ingeniería Mecánica, ha estudiado en EEU (en Tejas e Illinois) y Hong Kong. Se considera un activista climático, lo que se aprecia en la fuerte implicación de Beko con la promoción de la sostenibilidad. Su historia atribuye a ese compromiso climático algunas acciones que, en realidad, tienen más que ver con la aventura y el desafío personal. Casado y con tres hijos, no le arredran los riesgos. En 2019, año previo a la pandemia, subió al monte más alto de la Tierra, el Everest (8.848 metros), y aunque hoy en día escalar ese monte resulte más sencillo si se cuenta con el dinero necesario (hay empresas dedicadas a ayudar a los montañeros a alcanzar la cumbre con relativa «comodidad», hasta el punto de que se forman colas de turistas ascendiendo por la cresta), no obstante sigue siendo una actividad de riesgo, con frecuentes percances, y muy exigente. Cuatro años después, en la primavera austral (otoño boreal) de 2023, ascendió también al monte más elevado de la Antártida, casi 4.900 metros, y después esquió hasta el polo sur, en el corazón de este continente helado. Todo eso se inscribe en un conjunto de iniciativas del «equipo Arçelik», desplegadas por personas del grupo, que también incluyó ascensos al Kilimanjaro en 2011 y 2018, el Elbrus en 2017 y el Aconcagua en 2018 (no sabemos si Bulgurlu estuvo en todas ellas). Todo, para concienciar del riesgo de que se pierdan los glaciares del planeta, a causa del cambio climático.
Ese es el perfil del directivo que, como acabamos de evocar, a comienzos de 2023 firmó con Marc Bitzer, de Whirlpool, el acuerdo para la absorción de Whirlpool Emea por Beko Europe. Y el que, de alguna manera, ya sea directa o indirectamente, pilotará los nuevos tiempos.

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