¿Hasta ahora todo era extraoficial? Pues bien: ya ha sido confirmado por el aspirante.
Ayer, 9 de mayo, se publicó en China una información según la cual el grupo Midea ha confirmado la existencia de conversaciones con Electrolux para una eventual adquisición.
Market Visión fue el primer medio en dar cuenta, en España, de los rumores que apuntaban a esto. Ciertamente, al principio las «noticias» eran tan informales que no nos atrevimos a darle una credibilidad alta, pero lo recogimos porque procedían de buena fuente. Después fuimos ampliando la información. Y a estas alturas nos sorprende que prácticamente nadie se haya hecho suficiente eco en España, a pesar de la relevancia de los hechos. Quizá siguen considerándolo un rumor, o no se han enterado.
Claro que lo mismo sucedió durante meses con la noticia de que Whirlpool había puesto en venta su negocio en Europa. De hecho, fuimos recriminados hace meses por haber informado de lo que, según decían, eran especulaciones sin fundamento. Luego la realidad confirmó lo que avanzaba Market Visión, y el resultado fue el acuerdo con el grupo turco Arçelik para ceder a Beko Europe el control de las operaciones de Whirlpool en esta parte del planeta (pendiente del aprobado de las autoridades de la competencia).
En el caso de la oferta del grupo chino Midea por Electrolux ya hay medios serios, como Bloomberg, que han aportado detalles siempre en el plano de la filtración extraoficial. Ahora lo que tenemos es una manifestación oficial, producida en el departamento de relaciones con los inversores de Midea. Literalmente, según se ha publicado en China: «Se está discutiendo un acuerdo, pero aún no se ha tomado una decisión».
Como el lector ya sabe, y hemos informado en Market Visión, el principal propietario de acciones en Electrolux (Investor) ha sido receptivo, pero la oferta le parece escasa (infravalora la compañía, apoyándose en la cotización actual de los títulos en Bolsa, que podría subir próximamente), y por otro lado el accionista teme que EEUU pueda poner un veto a que una empresa china controle, tras la adquisición de Electrolux, su filial norteamericana que opera con la marca Frigidaire, por lo que demanda compromisos de mantener la oferta incluso si EEUU obliga a desprenderse de esa división.
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