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Belarra llama a boicotear a una empresa de distribución que considera «colaboradora» de Israel.
Como el lector ya sabe, desde hace pocos días España ha asumido oficialmente una línea diplomática de apoyo a Palestina, después de que Israel haya procedido a invadir parcialmente Gaza en respuesta a los ataques terroristas de Hamas perpetrados el 7 de octubre.
En esos ataques, militantes de la organización penetraron desde la franja de Gaza (Palestina), causando más de 1.400 asesinatos de civiles (y algunos militares), y el secuestro de cerca de 240 personas, que fueron llevadas a Gaza como rehenes.
La represalia militar de Israel, con invasión de la franja de Gaza para desalojar a las milicias de Hamas, ha tenido un fuerte impacto sobre la población civil. De trata de un territorio densamente poblado en el que la organización terrorista habita entre sus ciudadanos, con parte de sus instalaciones entremezcladas con las de uso civil, incluyendo, posiblemente, el subsuelo de hospitales. Hasta ahora han fallecido más de 13.000 palestinos en esta ofensiva israelí.
El presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, sorprendió la pasada semana con un discurso en Egipto que Israel consideró ofensivo, y que Hamas agradeció públicamente. Aunque en principio condenaba el terrorismo de Hamas, el reproche de Sánchez al dolor que causa la ofensiva israelí puede tomarse como una llamada a un comportamiento más humanitario, pero también ha sido interpretado como una concesión a los socios parlamentarios de Pedro Sánchez, los cuales, según se ha comentado en círculos políticos, le habrían exigido reconocer un Estado Palestino durante la presente legislatura.
Disculpen este preámbulo, pero es el contexto en el que se enmarca el llamamiento que la pasada semana formuló la secretaria general de Podemos, Ione Belarra, reclamando un «boicot» a las empresas que «colaboran con Israel».
Podemos fue un socio privilegiado de Sánchez en la anterior legislatura, y, aunque ahora está siendo relegada a una posición de casi «apestada», forma parte (como verso suelto) de la su actual mandato.
Todo esto viene a cuento en Market Visión por el hecho de que Belarra ha mencionado específicamente a Carrefour como una empresa a boicotear, atendiendo a su supuesta «colaboración con Israel».
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