Los sindicatos piden a Electrolux, en Italia, un plan de futuro.

Lamentan que, tras sucesivos planes de ajuste, la situación no mejore, y preguntan por los planes para recuperar mercado.

Ya hemos informado del recorte de empleo anunciado esta semana por Electrolux en Italia, para un total de 373 personas en todo el país. La Dirección de la empresa convocó a los representantes laborales a un encuentro el hotel Crown Plaza de Quarto d’Altino, una localidad de la provincia de Venecia, para darles cuenta de este plan, que incluye 168 despidos en la fábrica de Porcia (lavadoras) y 46 en la de Susegana (frigoríficos), así como una docena de despidos en la sede de Pordenone. Como ya explicamos, el ajuste afecta tanto a empleados de administración y oficinas (174 en total) como a trabajadores de taller (199). Al parecer (no ha quedado claro en las explicaciones dadas) buena parte de este número ya figuraba en un plan de ajuste comunicado en septiembre. Y el recorte se enmarca en una reducción de 3.000 puestos de trabajo en toda Europa.

Quizá lo más llamativo ha sido el debate entre sindicatos y dirección sobre los planes de futuro, ya que los representantes de los trabajadores no ven planes concretos para «recuperar cuotas que se están perdiendo» y mejorar la posición de la compañía en el mercado. Lamentan que, tras varios planes sucesivos de ajuste, no se vean resultados positivos.

Según indican, la compañía les ha trasladado que la demanda es débil en Europa, y que los problemas de la filial estadounidense han repercutido también en los volúmenes de fabricación en Italia.