Son plazos para comunicar decisiones, pero no presuponen nada en concreto, y cabe la posibilidad de que todo se dilate hasta cuatro meses más.
A mediados de la pasada semana, la autoridad de la Unión Europea reguladora antitrust comunicó que se fija como fecha límite el 23 de octubre, para tomar una decisión sobre la proyectada compra de Whirlpool Europe por el grupo turco Arçelik. Como se sabe, esa compra tomará en realidad la forma de una fusión asimétrica, mediante la constitución de una joint venture articulada en la ya constituida Beko Europe, en la que Whirlpool tendría solo un 25% y Arçelik el resto (75%), y a la que serán transferidos todos los activos de línea blanca de Whirlpool Europe, así como los de todas las operaciones de bienes tecnológicos de consumo de Arçelik.
Debe señalarse que la decisión que la UE comunique el 23 de octubre podrá ser de cuatro tipos:
- autorización,
- denegación,
- autorización con condiciones,
- o apertura de una investigación para recabar más datos.
En este último caso, se abriría una período adicional de cuatro meses para completar el dossier.
Con motivo de este anuncio, las agencias han informado también que la oficina de la competencia del Reino Unido tomará una decisión el 28 de noviembre, es decir mañana mismo. En efecto, y tal como informamos hace unos días, lo que la autoridad británica de la competencia (CMA) hizo a finales de julio fue indicar que abriría una investigación, y en efecto así lo confirmó en una notificación oficial a Arçelik y Whirlpool el 3 de agosto. Lo que hizo en esa notificación fue señalar el 28 de septiembre como «deadline» o fecha límite para finalizar la primera fase de ese procedimiento, y comunicar si aborda o no una segunda fase de investigación en profundidad.
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