La línea blanca ha tenido un mes de enero «suave».

No ha sido bueno, pero tampoco para quejarse mucho.

La gama blanca, en datos «sell-in», es decir, en entregas de la industria al canal, ha estrenado el año con retroceso de ventas en unidades del –4,21% en enero, según la reciente elaboración del comité de estadísticas de la patronal Applia.

En valor el descenso ha sido más suave, de –0,86%.

¿Inflación? ¿Mejora de mix? Probablemente lo primero, pero con un diferencial entre valor y unidades de 3,4 puntos, bastante más bajo que los 4,7 puntos de diferencia que se anotaban en enero de 2023 y mucho menos que los 9,4 puntos de enero de 2022. Por tanto, una inflación muy moderada.

Aunque cualquier retroceso es malo, el descenso de ventas «sell—in» en enero es mucho menor que en igual mes de los dos años anteriores.

En efecto, si ahora las entregas en unidades han disminuido un –4,2%, en enero del 23 caían un –12,2% y en enero del 22 un –6,9%.

Del mismo modo, en valor el –0,9% de ahora es mucho mejor que –7,6 en enero del 23, aunque peor que el crecimiento de +2,5% de igual mes en 2022 (si bien por entonces la causa de ese crecimiento sí que fue una fuerte inflación de precios en el sector).