Abre un procedimiento informativo para analizar los efectos de una operación anunciada hace un año.
El pasado jueves, 6 de julio, la Comisión Europea inició oficialmente una «encuesta» (investigación) antitrust para evaluar las consecuencias para la libre competencia que podría tener la adquisición de iRobot, fabricante de los robots-aspirador de la marca Roomba, por Amazon, que se anunció ya en agosto de 2022 (por tanto, hace prácticamente un año).
Hasta el momento, la compra tiene ya luz verde de la oficina de la competencia británica, otorgada en junio, pero la Comisión Federal del Comercio de los EEUU todavía no ha tomado una postura al respecto.
La CE estima que Amazon podría restringir la competencia en el mercado de aspiradores-robot en su canal de venta en línea, mediante técnicas como reducir la posición de otras marcas en los resultados de su motor de búsquedas, o aumentar los costes de anuncios publicitarios de estos artículos, aparte de primar las respuestas de su marca iRobot en la interacción de los usuarios con su asistente digital Alexa.
El canal online es particularmente importante para la venta de estos aparatos en varios países de la UE, según indica la Comisión. Por nuestra parte, podemos añadir que un gigante de meteórico crecimiento en España como Cecotec puede dar fe de la importancia a Amazon en su éxito particular (con los aspiradores Conga).
La Comisión se ha comprometido a finalizar su encuesta y tomar una decisión antes de que finalice noviembre.
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