Un incendio en Andalucía. Y, esta vez, no fue una batería recargable.

Sin embargo, el origen también podría estar en un producto electrodoméstico, aunque se dispone de pocos detalles.

Caso poco habitual, últimamente, el que se ha dado en un piso en el Polígono San Pablo de Sevilla. Sobre las diez de la mañana de ayer, lunes 25 de noviembre, vecinos de la zona alertaron de un incendio importante, con llamas saliendo por una de las ventanas. Bomberos, policía y servicios sanitarios se dirigieron al lugar. Apagaron el fuego, y se montó una tienda de campaña para prestar asistencia a los heridos, que fueron nueve. Tres de ellos fueron trasladados después a hospitales para atención por inhalación de humo, y otra a un centro de salud por quemaduras leves en una pierna. La más afectada fue una mujer que tenía alquilada una habitación. El propietario reside en otro piso del edificio, y había salido a hacer unas gestiones.

Esta noticia no tendría ninguna relación con el lector si no fuera porque se sospecha que el fuego comenzó en un televisor. En los últimos meses, noticias de este tipo suelen informar de problemas con baterías, ya sea de teléfonos móviles o de patinetes eléctricos. Este es un caso más infrecuente, y es pronto para saber la causa exacta del siniestro, suponiendo que realmente el fuego se iniciase en el televisor.

Se ha mencionado un posible cortocircuito. Es poca información, y eso ni siquiera permite saber si fue dentro del televisor o en la conexión a la red eléctrica. Tampoco se ha dicho si se trataba de un televisor de panel o de los antiguos televisores de tubo, que, lo crean o no, siguen existiendo y estando en uso.