En España, sólo está a disposición de una veintena de clientes.
En España, sólo está a disposición de una veintena de clientes.
Recordarán ustedes que el año pasado Smeg presentó una línea de pequeño electrodoméstico, con una colección «Años 50», fruto de la colaboración entre la marca italiana y los diseñadores Matteo Bazzicalupo y Raffaella Mangiarotti. Tostadora, hervidor («kettle»), robot de cocina y batidora de vaso, con formas redondeadas y compactas, y colores vivos, presentados como objetos útiles a la vez que simbólicos.
La gama de Pae de Smeg no ha llegado, sin embargo, a todos los países. Se vende en tres países anglófonos (Reino Unido, Australia, Suráfrica), algo en Alemania, y de forma contenida en el que parecería su mercado primero: Italia. Smeg la ofrece en todos esos países casi con cuentagotas.
Es también el caso de España, donde sólo la ha puesto a disposición de una veintena de clientes exclusivos, muchos de ellos estudios de cocina, y por supuesto puede verse en la Smeg Store de la calle Muntaner, en Barcelona.
Smeg no busca hacer un gran negocio en Pae, sino aportar exclusividad y diseño, en línea con la vanguardia estética de la marca. El pequeño electrodoméstico de la casa es ante todo un icono, un signo, una proclamación de estilo. Ese sigue siendo el lema de Smeg, desde hace muchos años: «Tecnología con Estilo».
[Publicado en MARKET VISION Suplemento 215 — marzo 2015 ].©