Una apuesta de Balay, avanzada a su tiempo, y continuada por BSH.
Hay mucha historia industrial y mucha investigación académica reunidas durante más de 30 años, para desarrollar comercialmente un producto como la placa de inducción para cocinar. Iniciada por Balay cuando todavía era una empresa española, y continuada por BSH (Bosch und Siemens Hausgeräte GmbH) cuando aquélla se integró en el grupo alemán, al cual aportó como un activo muy interesante esa línea de desarrollo.
En la década de los 80, el calentamiento por inducción era todavía un proyecto visionario para el grupo BSH, y todavía hoy es lo más vanguardista e innovador en tecnología de cocción de este nuevo siglo. El 24 de octubre se pudo ver en Montañana la sucesión de etapas tecnológicas que en ese tiempo tuvo lugar, como consecuencia de la colaboración entre Balay-BSH y la Universidad de Zaragoza, y que el director de desarrollo de placas de cocción fue explicando a los asistentes al acto conmemorativo, señalando los avances en I+D que cada generación supuso.
La producción de placas en Montañana empezó en 1989, pero fue realmente a partir del año 2000 cuando el mercado despegó. Hoy se venden aproximadamente 2,5 millones de placas de inducción en Europa cada año, lo que representa, en valor, aproximadamente el 40% de las placas de cocción del mercado, de todas las tecnologías. La producción de cinco millones de placas que ahora se conmemoraba sólo permitiría satisfacer, al ritmo actual, la demanda de dos años. O menos aún, puesto que la demanda sigue aumentando. Razón por la cual la capacidad productiva de BSH también deberá crecer.
— Una tecnología 100% española, y fabricada en la planta de Montañana para todo el mundo. Los asistentes al acto conmemorativo no sólo pudieron ver el proceso de desarrollo histórico de esta tecnología, sino también las plantas en funcionamiento, en las que se producen no solamente las placas de inducción, sino los hornos que salen también de las mismas unidades productivas.
El director general José Longás, tras hacer un repaso por la historia de Balay y el esfuerzo y tesón de aquellos que han apostado y trabajado por el desarrollo de la tecnología de inducción, ha destacado que BSH ha desarrollado varias generaciones de placas, como antes se ha dicho, a las cuales aplicó multitud de innovaciones y características diferenciales, protegidas por un escudo de más de 350 patentes.
BSH es el mayor fabricante del mundo, dijo, de placas de cocinar por inducción y líder de los mercados europeos, lo cual es el resultado de mucho trabajo, muchísimo conocimiento acumulado, la participación de muchísimos profesionales, muchos jóvenes muy bien formados, y una permanente investigación de las necesidades de los clientes.
En 2013, BSH-Balay ha lanzado la nueva generación de placas de inducción y, menos de seis meses después, han ganado ya en dos países europeos los tests de producto de organizaciones de consumidores y usuarios independientes.
[Publicado en MARKET VISION Suplemento 207 — ].©