A finales de octubre, BSH España celebró un acontecimiento especial, en su fábrica de Montañana.
El 24 de octubre, la empresa BSH Electrodomésticos España, S.A., filial del grupo alemán BSH, pero con sólidas raíces españolas, organizó una fiesta de familia para conmemorar el haber alcanzado en su planta zaragozana de Montañana la fabricación de la placa de inducción (un desarrollo tecnológico genuinamente suyo) número 5.000.000; un hito digno de celebrar siempre, y más aún si se ha logrado en un entorno tan poco favorecedor como el de los últimos años.
El director general de BSH España, José Longás Pellicena, lo puso de manifiesto en la presentación del acto. El sector español de electrodomésticos ha facturado hasta septiembre de 2013 un 8% menos que en el mismo período de 2012, continuando un descenso que se ha venido acentuando desde el comienzo de la crisis económica internacional. Como su director de márketing, Jesús Bayona, repetía, el efecto acumulado de este retroceso de varios años hace que el volumen anual de venta del sector hoy día sea la mitad del que tenía en 2007, y esté por debajo de lo que era el nivel de reposición del parque antes de que empezara la crisis.
De todos modos, Longás prefiere hacer hincapié en la vertiente positiva que también existe: BSH España espera crecer en el actual ejercicio (aunque había retrocedido en el anterior), y con ello seguir ganando participación en el mercado nacional, donde ya tiene una cuota del 30%, y seguir incrementando su presencia exterior (que supuso el año pasado el 63% de su facturación).
La cifra total de ventas del grupo en 2012 fue de 1.451 millones de euros, un 4,7% menos que en 2011, pero espera cerrar el ejercicio actual con un incremento del 3% sobre 2012.
BSH España tiene hoy en el país 4.000 trabajadores, la mitad de ellos en Zaragoza, donde cuenta con tres fábricas (dos en Montañana y una en La Cartuja), el almacén logístico de Plaza y la sede central de servicio al cliente. Otras personas de su cuadro directivo son Fernando Gil Bayona, director de ventas de Línea Blanca, y Esther Riglos, directora del negocio de PAE.
Existen también cuatro plantas de producción en Estella y Esquíroz (Navarra), Santander y Vitoria, así como un centro operativo y la sede social en Huarte (Navarra). El grupo comercializa sus productos con seis marcas del grupo: Bosch, Siemens, Gaggenau, Neff, Ufesa y Balay (estas dos últimas, de origen español).
El acto conmemorativo que motiva esta información tuvo lugar en la fábrica número 1 (es decir, la más histórica, pero a la vez la más moderna por la transformación a la que ha sido sometida) de las de Montañana, en la cual nació y se fue enriqueciendo técnicamente la placa de inducción para uso culinario. Fruto de un proyecto de colaboración tecnológica entre la empresa de producción de electrodomésticos y la Universidad de Zaragoza, en una experiencia sostenida en el tiempo, poco habitual en nuestro país.
Al acto conmemorativo del 24 de octubre asistieron la presidenta de Aragón, Luisa Fernanda Rudi, y el consejero de Industria e Innovación de la misma Comunidad, Arturo Aliaga. El anfitrión del acto fue el director de la propia factoría, Ignacio Arruga. El director de desarrollo de placas de cocción, José Andrés García, que estaba acompañado por el vicepresidente de tecnología del área de cocción de BSH, doctor Jörg Ulrich, explicó el proceso de investigación seguido para el desarrollo de este producto. Y el director general de BSH España, José Longás, acompañó a los asistentes en un recorrido por la fábrica de Montañana donde la inducción se desarrolló (y de donde ahora sigue saliendo para todos los mercados), al final del cual las personalidades presentes pusieron su firma en la placa de inducción 5.000.000 que se conservará como testimonio histórico.
Fuera ya del programa oficial, la jornada se completó con un encuentro entre los directivos del grupo BSH España, encabezados por su director general, y los medios de comunicación.
[Publicado en MARKET VISION Suplemento 207 — ].©