El establecimiento reabrirá dentro de unos meses, con menos superficie, acompañada por otras tiendas y restaurantes.
Hay «noticias» que producen un sobresalto, hasta que compruebas que no es nada nuevo, en realidad. La pasada semana, el medio online Ok diario, que es especialista en titulares engañosos (pueden ustedes comprobarlo si lo siguen para cualquier tema, un ejemplo claro ha sido estas semanas últimas su cobertura de un asunto de aseguradoras se salud pública —caso Muface—, y no digamos los temas de naturaleza política), lanzó este titular: « Adiós a la Fnac de Callao: cierra sus puertas y lanza un comunicado oficial». Si usted clicaba vería que el mencionado comunicado no daba un «adiós» sino un «hasta luego». Y, si tienen ustedes cierto seguimiento del sector (como se les supone, puesto que leen Market Visión), sabrán que la noticia viene anticipándose desde hace dos años, pues en mayo de 2022 ya anticipamos que el contrato de alquiler de Fnac en Callao estaba en proceso de renegociación y que la cadena de distribución de bienes culturales y equipamiento del hogar y su casero estaban planteando una remodelación del edificio, tras la que Fnac reduciría su superficie ocupada. Ciertamente, la socimi Merlin, propietaria del inmueble, tenía un plan que hace dos años y medio describíamos como «un proyecto para llenar seis plantas del edificio (en el que Fnac solo ocupaba comercialmente dos y sótano) con restaurantes de distinto perfil gastronómico»; proyecto al que posteriormente se ha añadido la posibilidad de que entren algunas tiendas, para convertirlo en un centro mixto, comercial y de restauración.
Lo que sí que es nuevo es que Fnac deberá cerrar por completo mientras se realizan las obras de remodelación del edificio, que ya han comenzado. Se especulaba con la posibilidad de efectuar las reformas escalonadamente, de un modo que no perjudicase a la continuidad de la tarea comercial, pero se ha visto que es imposible, después de haber comenzado los trabajos en los sótanos. De este modo, el pasado sábado, 11 de enero, ha sido el último en que ha permanecido abierta la tienda.
Los cambios principales en el edificio son la ampliación de la superficie ocupada y la reducción de la superficie de Fnac. Como hemos dicho, antes solo se ocupaban dos plantas más sótano, y en el nuevo proyecto se ocuparán seis, con lo que, si antes estaba en uso comercial un 40% del mismo, en adelante será un 70%. Pero Fnac reducirá su superficie de 7.000 a 4.000 m2. Esto es algo que se está viendo en otras grandes tiendas de electrónica de consumo y electrodomésticos, de una parte motivado por la caída de la demanda de soportes musicales y videográficos, que ocupaban un área destacada, y, de otra, por el auge de la venta online, con lo que muchas de estas tiendas trabajan cada vez más como puntos de recogida, y cada vez menos como espacios de exposición y venta.
Fnac se instaló en el edificio de Callao, 5, de Madrid, en 1993. Durante años el inmueble había sido un gran almacén de Galerías Preciados.
Fnac Callao confía en poder reabrir antes de que finalice el presente año, 2025.
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