Ordena reabrir el sumario y ampliar la investigación. Entre otras cosas, quiere indagar sobre el origen y las causas del fuego.
La historia del incendio del 22 de febrero en el inmueble de viviendas en el barrio valenciano de Campanar no ha concluido. En principio se trata de un siniestro con víctimas (diez fallecidos, numerosos desplazados al quedar calcinado el edificio), que no tendría relación con este sector si no fuera porque el fuego comenzó en una cocina, con probable origen en un frigorífico. Ya hemos dado detalles del informe pericial, y parecía que todo estaba cerrado después de que se estableciese el carácter fortuito. Sin embargo, la Sección Cuarta de la Audiencia de Valencia ha ordenado reabrir la causa, a petición de las víctimas, por entender que es necesario amplias la investigación.
La solicitud fue presentada por familiares de cuatro integrantes de una familia, todos fallecidos, y a la misma se adhirieron fiscalía, una asociación de damnificados, y la comunidad de propietarios.
Esto tampoco guardaría vínculo con el sector si afectase únicamente a responsabilidades de la constructora u otros relacionados con el revestimiento y las condiciones de tiro de la fachada. Pero el auto considera necesario practicar nuevas diligencias para, entre otras cosas, determinar mejor el origen y las causas del fuego. Critica el auto de sobreseimiento que dictó el Juzgado, por basarse en «un simple oficio» de la Brigada Provincial de la Policía Científica de Valencia, que descartaba la etiología criminal de los hechos. Dicho oficio «no tiene la consideración de un informe», y solo traslada al instructor una «primera y aventurada impresión», sin profundizar con un examen riguroso del origen y causa del siniestro.
Lo más probable es que esa ampliación de investigación se oriente a indagar en otras circunstancias, por ejemplo (así se enumeran algunas de ellas en el auto) si el edificio contaba con las oportunas licencias, si los materiales de construcción contribuyeron a la propagación del fuego, si se cumplían las normativas y si se había practicado el necesario mantenimiento. Cosas que puedan conducir al pago de indemnizaciones, probablemente. No obstante, y como decimos, se incluye de modo expreso la necesidad de precisar el origen y las causas del fuego.
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