Los objetivos de rentabilidad de las cadenas son imperativos, en Francia y en cualquier país.
Lo decíamos la semana pasada: Fnac Darty se ha fijado la meta de que todos y cada uno de sus establecimientos sean rentables para 2025. Eso atañe a todos los países.
En dicho contexto se inscribe el cierre anunciado, para finales de año, de su tienda Fnac en los Campos Elíseos de París. Abierta en 1997, una publicación del sector de la moda decía que de este modo quedará libre un local de 3.000 m2 en «la más bella avenida del mundo».
La alcaldesa del octavo distrito (equivalente a nuestro alcalde de barrio) de París ha lamentado que este cierre, y otros ya programados o ejecutados, de diversas empresas de comercio y ocio, ponen en evidencia que los Campos Elíseos se están convirtiendo en «una avenida de mega-ricos». Aparte de las tiendas de lujo, los propietarios son ya, sobre todo, «Qatar y las grandes compañías de seguros».
Pero no es solo esa tienda. Estos días se anuncia un cierre de Darty, en centro comercial, que no tendría la menor relevancia como noticia en sí misma, pero que se inscribe en ese reajuste de mapa de tiendas, orientado a la rentabilidad.
© MARKET VISION