El precio, la autonomía, la durabilidad y la seguridad, según un informe de Energy Sistem.
La manera en que los consumidores se enfrentan al proceso de compra ha sufrido un profundo cambio: la combinación de factores como la transformación tecnológica y la evolución demográfica han generado una nueva tipología de comprador. Este usuario no sólo está más conectado, sino que también está más informado, es más exigente, más responsable y capaz de comprar de manera selectiva.Una de las áreas donde se materializa esta nueva tendencia es en la compra de un nuevo dispositivo móvil. Recientemente, el Panel de Hogares CNMC daba a conocer que ocho de cada diez españoles con móvil disponen de un smartphone, lo que demuestra la importancia que tienen estos terminales en la vida diaria de sus usuarios. Más evidencias: el 73% asegura que duerme con el smartphone encendido y que es lo primero que consulta al levantarse y acostarse, según el informe «10 Epic Fails» de Sondea para Dialogando.
El posicionamiento del smartphone como compañero inseparable del consumidor español ha influenciado en gran medida en sus patrones de compra. Además de estar más informado, se caracteriza por buscar la mejor relación coste-beneficio y evaluar en profundidad las funciones que realmente necesita.
La responsable de comunicación de la firma de productos tecnológicos Energy Sistem, Noemi Climent, revela qué importa más a los españoles a la hora de comprar un teléfono inteligente:
—Precio. El precio suele variar según las especificaciones, que marcarán el rendimiento del dispositivo y la experiencia de usuario final. Por lo general, la mayoría de consumidores españoles se mueven en un rango de precios aproximado de 100 a 300 euros, donde se sitúa la gama media. Si el usuario busca un móvil de alta gama, suele tener en cuenta los terminales que superan esa cifra.
—Autonomía. Es la segunda característica más importante. Los consumidores buscan que, al menos, dure hasta el final del día. La mayoría opta por una batería de 2.400 mAh en móviles de gama media o de hasta 3.000 mAh en alta gama. Energy Sistem destaca que sus móviles Energy Phone Pro 3 y Energy Phone Max 3+ incorporan una batería de litio de 3.000 y 4.000 mAh, respectivamente.
—Durabilidad. Una pantalla agrietada o rayada puede entorpecer en gran medida la experiencia de usuario, y es una de las reparaciones más comunes (pero no baratas). Existen multitud de cubiertas protectoras y fundas anti caídas, pero muchos usuarios rechazan estos extras, ya que el dispositivo se vuelve más voluminoso. Energy Sistem resalta que su smartphone Energy Phone Pro 3 ofrece una alta resistencia al rayado y a los impactos gracias a que incorpora protección Dragontrail Glass y tratamiento antihuellas.
—Seguridad. El sensor de huella dactilar para desbloquear el terminal se ha popularizado y ya no es una característica exclusiva de los teléfonos de alta gama. Cada vez más usuarios españoles lo consideran imprescindible, ya que ofrece otras nuevas funciones, como realizar pagos móviles a través de aplicaciones bancarias.
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